The Gift :: Espanha

«La unión de Portugal y España ya existe en la práctica»
El grupo luso The Gift actúa tres noches seguidas con su pop electrónico en el Teatro Bellas Artes de Madrid

MADRID. - Desde Portugal, pero sin fado. Desde Portugal, pero cantando en inglés. Desde Portugal, pero cada vez con más presencia en España. The Gift se ha convertido en el único grupo que logra traspasar de verdad (más allá de los circuitos elitistas, como le sucede a Buraka Som Sistema) las fronteras del país vecino sin que nadie pueda siquiera atisbar una pizca de los tópicos asociados con la música lusa.

El cuarteto de Alcobaça, pequeña localidad a una hora de Lisboa, retorna presto a mostrar un perfil distinto de su pop electrónico a veces lánguido, a veces intenso. A partir de hoy, la banda de los hermanos Gonçalves actúa durante tres noches seguidas en el Teatro Bellas Artes de Madrid acompañada por un coro femenino e instrumentistas que tocan el arpa o el xilófono.

En total, 13 músicos sobre el escenario para sacar brillo a las dos grandes facetas de The Gift: la más sugerente y la más fiera. Siempre entre las guitarras y el protagonismo de los teclados para que las texturas sintetizadas arropen la acusada personalidad vocal de Sónia Tavares.

«Es la primera vez que hacemos este tipo de concierto en España. Teníamos necesidad de buscar otros públicos y de actuar de una forma más perfeccionista, más detallista. Por eso, la primera parte es minimalista, más íntima y, en la segunda, gritamos más», declara el líder de la pujante formación, Nuno Gonçalves, antes de puntualizar: «Es el fin de un ciclo, el que abrimos en 2004 y que se caracteriza por estas dos caras nuestras».

El grupo, con álbumes a sus espaldas como Film, AM/FM o Fácil de entender (en vivo), no deja de apostar por la complejidad en los arreglos y exhibe, con su intención de cerrar una etapa, su voluntad manifiesta de no caer en la repetición.

«Tiene que haber un corte en nuestra carrera para cambiar el sonido y la estética», explica Nuno Gonçalves. Eso sí, no habrá disco nuevo hasta finales de este año.

The Gift se distingue por bucear bajo las aguas de la diferencia, sin parangón en el panorama de la música portuguesa, dominada por las divas fadistas, pero también por toda una pléyade de propuestas modernas: Cindy Kat, Novembro, Micro Audio Waves, Wray Gunn o Armando Teixeira, una criatura imbuida del espíritu de Bowie que utiliza el pseudónimo de Balla para dar rienda suelta a su charme marcadamente afrancesado. Todos, sin embargo, con el estigma de ser rehenes de sí mismos, lo que les impide cruzar a España.

«Nuestra música sería otra si no fuéramos portugueses. Eso es algo que, inconscientemente, está ahí. Pero hoy en día no hay un sonido para cada país. Cualquiera que haga pop y cante en inglés puede ser de cualquier parte del mundo. Y en Portugal, por supuesto, hay muchas cosas aparte del fado. Probablemente, si no fuéramos portugueses no existiría en nosotros esa intención de alejarnos de la tradición», aclara Sónia Tavares, cuyo registro vocal grave suele halagar el gran tótem de la música lusa, Rodrigo Leao.

Los componentes de The Gift no eluden hacerse eco del debate que se extiende por Portugal desde que José Saramago dijo que el país presidido por Anibal Cavaco Silva acabaría integrándose en España. «La unión con España ya existe en la práctica, aunque no política ni culturalmente. Pero podíamos abrirnos mucho más. Hay muchas similitudes entre Madrid, Barcelona, Lisboa y Oporto», señala Nuno Gonçalves. Y se suma Sónia Tavares argumentando: «Bueno, si este debate existe más en Portugal que en España es porque estamos más debilitados y llegamos a pensar: 'si estuviésemos integrados en España, nuestro salario y nuestra situación serían mejores'».

En espera de las siguientes grabaciones de The Gift, su canción In repeat sobresale en el disco recopilatorio Lisboa, coordinado por Rodrigo Leao y Tiago Faden en el marco de las conmemoraciones por el 25 aniversario del Fragil, uno de los templos de la noche de la capital, junto a Music Box, Jamaica, Incognito y especialmente Lux, la discoteca y sala de conciertos que lleva años siendo un auténtico must para tomar el pulso a la escena electrónica.

FRANCISCO CHACON in El Mundo - 17/01/2008